Una oración desde Madrid

Algunas frases escritas en las paredes de ese oratorio improvisado en que se ha convertido el terminal de cercanías de la Estación de Atocha en Madrid:

En ese tren íbamos todos

No estamos todos, faltan 200

¡Basta ya!

No lo habéis conseguido. Ahora estamos más unidos ¡No tenemos miedo!

A todas las personas afectadas quiero recordarles que millones de personas estamos con vosotros. ¡Ánimo! Todos lloramos, os apoyamos.

Este es el silencio. Este es el dolor de la libertad

No a la violencia, no al terror. Sí a la vida, sí a la paz

A mí no me tocó por poco, y puedo llorar con España

Yo me bajo en Atocha, yo me quedo en Madrid (firmado: Joaquín Sabina)

Nacemos libres, moriremos libres.

Habéis herido a un pueblo que dijo no a la guerra. En los mismos trenes que un 15-F iban cargados de revolución y esperanza hacia Atocha.

Madrid-Bagdad. Bagdad-Madrid. Nuestras religiones son distintas, nuestros muertos igual de inocentes. Descansen en paz.

Mensajes de solidaridad de personas de Ecuador, Perú, Argentina, Puerto Rico, Colombia, Rumanía, Marruecos, Túnez, Italia, Francia, Alemania, y un largo etcétera.

Algunas oraciones

En las manos maternales de María, Virgen de la misericordia, ponemos de manera particular a las víctimas del terrible atentado terrorista de Madrid. Te pedimos, María, que protejas y veles por la querida nación española, por Europa y por el mundo entero (Juan Pablo II)

Espíritu Santo, te pedimos por los que en España son tocados en lo más profundo de sí mismos. Conoces nuestro deseo de que todos encuentren consuelo. Jesucristo, luz interior, concédenos acoger tu amor (Hermano Roger de Taizé)

A pesar de todo el dolor de nuestro corazón, estamos experimentando la ternura del Padre a través de todas las innumerables personas que han llorado con nosotros.
Os pido una oración, no por mi hijo, que ya está con el Padre, sino por los asesinos de hecho y los que han manejado esos hilos, para que lleguen alguna vez a encontrar el amor que necesitan para curar su mal. Nosotros hemos prometido ante su cadáver que lucharemos por lograr , aunque sea una pizca,que esta lacra se extinga. Somos más los que amamos ¿nos van a poder?. (Pilar, madre de uno de los jóvenes asesinados el 11-M)