“En las vivas aguas de la vida…”

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Bienvenido a la Pascua 2008 en el Hornico –Jaén–. Juntos vamos a reflexionar, celebrar y vivir el núcleo de nuestra fe cristiana. Vamos a intentar que estos días sean un tiempo de armonía entre nosotros y con la naturaleza. Estamos en el entorno de un Parque Natural, para profundizar el tema que AyC presenta este año: Agua y Espíritu.

El tema de nuestra pascua lo hemos tomado de una mística española, Teresa de Ávila. El encuentro con Dios lo buscamos EN LAS VIVAS AGUAS DE LA VIDA. Cada día aludiremos a la realidad que nos desafía, porque ella encierra la posibilidad de un nuevo nacimiento.

Si con los símbolos del agua y el espíritu expresamos nuestro deseo de reconciliar la búsqueda interior y las responsabilidades ante nuestro mundo, aludiendo a las VIVAS AGUAS DE LA VIDA queremos hacer atención a la realidad para poder afirmar que la Vida es más que la vida biológica.

Jesús no viene a prolongar la vida física, viene a comunicar la Vida trascendente que él mismo posee y de la que puede disponer (Jn 5,26). Esa Vida es de tal fuerza, que anula el carácter catastrófico de la muerte en el ser que la sufre. Es la misma Vida de Dios que él posee por el Espíritu, la que nos entrega.

No hemos de esperar a la muerte para conseguir Vida. La condición que se requiere es la adhesión a Jesús. A la adhesión responde él con el don del Espíritu-Vida, nacimiento a una nueva Vida que se sitúa más acá y más allá de la muerte física. Se trata de aceptar la Vida definitiva que Jesús posee y puede comunicar al que se adhiere a él.

Al reunirnos para celebrar la PASCUA lo que afirmamos es que la muerte física no interrumpe la Vida. Morir no significa dejar de vivir. Cuando la comunidad está al servicio de la vida entregándose ella misma, entonces está preparada para entender la muerte de Jesús y su resurrección.

Te invitamos a rezar contemplando la naturaleza, disponiéndote a cantar, pasando tiempos de silencio y soledad que nadie te impone. Acogiendo estos días como una posibilidad para que el corazón comprenda el núcleo de la vida.

Casi todas las celebraciones serán aquí, entre nosotros, así la liturgia vendrá marcada por lo que cada uno de nosotros aporte.

Todos somos protagonistas en esta Pascua. Si se resucita entre LAS VIVAS AGUAS DE LA VIDA, necesitaremos organizar grupos para las comidas y limpieza del comedor, limpieza de los lugares comunes, grupo de liturgia que disponga los lugares donde se celebre la liturgia, un grupo de música y canto. Para que el río de la vida pase por nosotros queremos facilitar un encuentro intergeneracional. Queremos que los jóvenes tengan algún encuentro con los adultos y de éstos con los jóvenes. Y que jóvenes y adultos acompañemos a los adolescentes y a los niños, presentándoles la fe en Jesús al vivir nuestro hacernos personas responsables. Organicemos un grupo que lleve la animación de los niños. Otro grupo para acompañar a los jóvenes.

Esta Pascua la llevamos adelante entre todos, para que todos tengamos un tiempo de soledad y silencio, la posibilidad de reflexionar los temas diarios, rezar desde la naturaleza y desde la belleza de la poética. Vamos a tener introducciones en video presentando la tierra de Jesús, donde el próximo verano realizaremos el encuentro intercultural. Intentaremos visionar una película (El río de la vida) y dialogar sobre ella. Tiempo para un encuentro personal y entre nosotros, para conocernos y entablar lazos de amistad. Tiempo también para intercambiar iniciativas y sostenernos los unos a los otros en los compromisos que estamos llevando adelante.

Para acoger a casi todos los que han solicitado participar en la Pascua hemos tenido que habilitar dos espacios para dormir. Contamos con la solidaridad de aquellos que disponéis de coche para llevar o traer a quienes les ha tocado vivir en la casa más pequeña.

Con tu aportación económica se cubren los gastos de la acogida en las dos casas, las comidas y los materiales de la Pascua. En el tríptico se indicaron 150€ para los adultos y 100€ para los niños. El sábado se te entregará un sobre para que hagas tu aportación posible. En nuestros encuentros la economía no es el determinante, por eso funciona una caja de solidaridad para ayudarnos los unos a los otros y hacer posible que participen quienes tienen una floja economía o pasan una mala racha.

A través de los temas diarios hablaremos de algunos de los proyectos que estamos acompañando o formulando en AyC, pero nunca exclusivamente. Si hacemos referencia a nuestros proyectos es para no quedarnos solo en palabras. Intentamos poner de manifiesto la importancia de cualquier compromiso a la hora de transformar para mejor la realidad, en la medida de las posibilidades de cada uno.

AyC no es una ONG, por eso abrimos estos espacios de espiritualidad para profundizar los valores que intentamos asumir en la vida cotidiana allí donde cada uno ejerce su responsabilidad.

Bienvenido a esta Pascua 2008. Está en tus manos .