Austria

En 1918, tras la derrota en la Gran Guerra y la desmembración del Imperio, se crea la República de la Austria alemana, siendo modificada por los vencedores de la I Guerra Mundial y convirtiéndose en Austria, una república parlamentaria, que tuvo una vida caracterizada por la permanente crisis económica, política y social. En 1934, el canciller Engelbert Dollfuss estableció una dictadura conservadora, que no pudo hacer frente al empuje anexionista de la Alemania nazi.

Austria fue anexionada por la Alemania Nazi en 1938 (el Anschluss) pasando a ser el Ostmark dentro del Tercer Reich. Tras la derrota de los Nazis, las fuerzas aliadas ocuparon Austria desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta 1955, año en que el país volvió a ser plenamente independiente con la condición de que permaneciera neutral. De cualquier manera, tras el colapso del comunismo en la Europa del Este, Austria incrementó su participación en los asuntos europeos. En 1995 se convirtió en miembro de la Unión Europea y en 1999 adoptó el Euro.

La mayor parte del territorio de Austria, dos tercios del total, está dentro de la sección oriental de los Alpes, que alcanzan alturas de más de 3000 m. La población se concentra en los valles de los ríos, entre los que destacan el Danubio y su afluentes Inn (que pasa por Innsbruck) y Salzach (que pasa por Salzburgo). Tiene una extensión de 83.871 km² (un poquito menos que Andalucía), y una población de 8.292.322 personas.

Austria es uno de los 10 países más ricos del mundo en términos de PIB per cápita. Tiene una economía social de mercado bien desarrollada, un nivel de vida muy elevado y unos excelentes servicios sanitarios y sociales. Hasta la década de 1980, numerosas empresas estaban nacionalizadas. En los últimos años, sin embargo, la privatización ha reducido las explotaciones estatales a un nivel comparable al de otras economías europeas. Junto a una industria altamente desarrollada, el turismo internacional es la parte más importante de la economía nacional.

Desde el punto de vista religioso, tiene una fuerte mayoría católica (70%) con importantes minorías protestante (6%) y ortodoxa (2%). El número de musulmanes está en aumento y alcanza ya el 4% de la población.

Austria fue la cuna de numerosos científicos con fama internacional, lo que le ha valido que 20 austriacos (de origen y/o nacionalidad) hayan recibido el Premio Nobel en alguna de las ramas científicas. Entre ellos se encuentran Ludwig Boltzmann, Ernst Mach, y Christian Doppler, destacados científicos en el siglo XIX. En el siglo XX, las contribuciones de Erwin Schrödinger y Wolfgang Pauli a la  mecánica cuántica fueron fundamentales para su desarrollo durante los años 1920 y 1930.

Además de los físicos, Austria fue el lugar de nacimiento de dos de los más grandes filósofos del siglo XX, Ludwig Wittgenstein y Karl Popper, así como de los biólogos Gregor Mendel y Konrad Lorenz, el matemático Kurt Gödel y los ingenieros Ferdinand Porsche y Siegfried Marcus.

Pero la especialidad científica austríaca por excelencia ha sido siempre la medicina y la psicología, ya desde la época medieval con Paracelso. Eminentes médicos como Theodore Billroth, Clemens von Pirquet y Anton von Eiselsberg han construido sobre los logros del siglo IX la Escuela de Medicina de Viena. Austria fue el hogar del médico y neurólogo Sigmund Freud, de los psicólogos Alfred Adler y Hans Asperger y del psiquiatra Viktor Frankl.

La Escuela de Economía de Austria, que se destaca como una de las principales orientaciones de la teoría económica, está relacionada con los economistas austriacos Joseph Schumpeter, Eugen von Böhm-Bawerk, Ludwig von Mises y Friedrich von Hayek (Premio Nobel de Economía).

Viena

Viena (en alemán: Wien) es una ciudad de Europa Central situada a orillas del Danubio, al pie de las primeras estribaciones de los Alpes. Capital de Austria, así como uno de sus nueve estados federados (Bundesland Wien).

Con una población de 1.670.347 habitantes (2007), Viena es la mayor ciudad de Austria y su centro cultural y político. El área metropolitana cuenta con 2,3 millones de habitantes, población similar a la de la ciudad en 1914.

La ciudad tiene una larga historia, es una de las más antiguas capitales de Europa, por lo que cuenta con un importante patrimonio artístico. Durante el siglo XIX fue una de las grandes capitales musicales del Mundo y a principios del siglo XX meca de la filosofía y el debate político de Occidente, así como uno de los principales centros culturales mundiales.

La lista de músicos que vivieron y compusieron en Viena es impresionante: Gluck, Mozart, Haydn, Schubert, Bruckner, Wolf, Johann Strauss padre, Johann Strauss hijo y Mahler, así como los miembros de la Segunda Escuela de Viena.

Entre los pintores destaca el pintor simbolista Gustav Klimt y el círculo de pintores expresionistas formado por de Oskar Kokoschka, Egon Schiele y Max Oppenheimer

Tres ideas vienesas que marcaron el siglo XX

Algunas de las ideas más fascinantes que han marcado el siglo XX vieron la luz en Viena. Por citar solamente tres:

1. El Psicoanálisis (1900)

En 1886, Freud se casó y abrió una clínica privada en Viena, donde aplicaba la hipnosis para tratar a enfermos mentales. Más tarde, aunque mantuvo en la terapia varios aspectos de esta técnica, reemplazó la hipnosis por la asociación libre y el análisis de los sueños. Todo esto se convirtió en punto de partida del psicoanálisis. Freud fue designado profesor en la Universidad de Viena en 1900. Desde entonces empezó a formar discípulos que se convertirían en los líderes del movimiento psicoanalítico.

Las teorías de Sigmund Freud y el tratamiento que daba a sus pacientes causaron un gran revuelo en la Viena y el debate sobre las mismas continúa en la época actual. Sus ideas son a menudo discutidas y criticadas, y muchos consideran su obra como más bien perteneciente al campo del pensamiento y de la cultura en general. Además, existe un amplio debate sobre si el psicoanálisis y los tratamientos asociados a él pertenecen al ámbito de la ciencia.

La división de opiniones sobre Freud se puede resumir de este modo: por un lado, sus seguidores más convencidos le consideran un gran científico de la medicina que descubrió importantes verdades sobre la psicología humana; y por otro, sus críticos lo ven como un filósofo que replanteó la naturaleza humana y nos ayudó a derribar tabúes, pero cuyas teorías, como ciencia, fallan en un examen riguroso.

De origen judíos, Freud tuvo que exilarse y murió en Inglaterra en 1939 a causa de una sobredosis de morfina, que se autorrecetaba para calmar los dolores que padecía debido al cáncer.

2. La música dodecafónica (años 1920)

El Compositor Arnold Schönberg ideó este método de composición musical en los años 1920. Significa música de doce tonos es una forma de música atonal, con una técnica de composición en la cual las 12 notas de la escala cromática son tratadas como equivalentes, es decir, sujetas a una relación ordenada que (a diferencia del sistema mayor-menor de la tonalidad) no establece jerarquía entre las notas. Se escribe siguiendo el principio de que todos los doce semitonos o notas son de igual importancia, siendo la opuesta a la tonal, en la cual ciertas notas son predominantes y con una tonalidad determinada.

chönberg y sus alumnos (Alban Berg, Anton Webern y otros) aplicaron este método y crearon la llamada Segunda Escuela Vienesa. Su influencia ha sido decisiva en la música del siglo XX.

Schönberg, que era judío, también tuvo que exilarse a los Estados Unidos. Vivió en California hasta su muerte.

3. Los teoremas de la incompletitud de Gödel (1930)

Primer teorema: En cualquier formalización consistente de las matemáticas que sea lo bastante fuerte para definir el concepto de números naturales, se puede construir una afirmación que ni se puede demostrar ni se puede refutar dentro de ese sistema.

Segundo teorema: Ningún sistema consistente se puede usar para demostrarse a sí mismo.

Dicho de forma más poética: Todos los sistemas consistentes están abiertos a lo indefinible y todo sistema consistente requiere de otros para demostrar su propia verdad.

Kurt Gödel, aunque no era judío, se exiló con la llegada del nazismo y fue profesor en Princeton, donde coincidió con Einstein. Éste decía al final de su vida que "su propio trabajo ya no importaba mucho, que llegaba al Instituto únicamente para tener el privilegio de caminar a casa junto a Gödel".

En su vejez Gödel tenía temores obsesivos de ser envenenado, y no comía a menos que su esposa Adele probara la comida antes que él. A finales de 1977 Adele fue hospitalizada durante seis meses y no pudo continuar probando la comida de su marido.  En su ausencia, murió de hambre.