Pascua 2013

El Hornico (Jaén), 28-31 de marzo

Mensaje de Pascua

Descargar este mensaje en PDF

En medio de la proclamación de que Dios ha muerto,
percibimos los signos de una experiencia auténtica de Dios,
él está resucitando en las conciencias de no pocos de nuestros contemporáneos.

Una grieta de luz en el muro de la improvisada capilla ha inspirado las celebraciones de estos días en El Hornico (Jaén). La belleza de ese lienzo, los iconos, la música ha sido una de las ondas que nos ha conducido a través de las celebraciones de Semana Santa hasta la mañana de Pascua.

La acogida mutua ha hecho visible una red latente entre los amigos de Acoger y Compartir venidos desde Alemania, Italia, Zaragoza, Madrid, Ciudad Real, Cuenca, Granada, Jaén, Almería. Las distintas procedencias nos han recordado que la aceptación del seguimiento de Cristo nos lanza más allá del círculo de lo cotidiano.

En la dinámica de presentación, la profecía de Oseas: “Con lazos humanos los atraía, con cuerdas de amor” (11,4) nos ayudó a comprender el tema elegido para esta Pascua “Como ondas en el agua…” y a iniciar un compartir que ha ido a más a lo largo de estos días. Palabras como “círculos”, “ondas”, “cuerdas”, “energía”, “impulso”, han brotado de la expansión generada por el Cristo resucitado.

Nos ha inspirado la reflexión de estos días la sugerencia que nos hace la Encíclica Ecclesiam Suam (Pablo VI, 1964)de vivir la Iglesia como círculos concéntricos que se abren a un diálogo generoso y transmiten una energía generadora de ondas cada vez más amplias. Así hemos trabajado las Propuestas 2013 de la comunidad ecuménica de Taizé a los jóvenes.

El cuadro “Pedro Arrepentido”, de Rembrandt, nos ha recordado que el arrepentimiento puede resituarnos en la opción hecha por el evangelio. Los gestos y las palabras del nuevo sucesor de Pedro, Francisco, también han resonado entre nosotros. Refiriéndose a la crisis de civilización dice que “si sabemos barrenar su ola, podremos meternos mar adentro en nombre del Señor y echar las redes”. La presencia de distintas generaciones en la Pascua evidenciaba la importancia de no obstaculizar la transmisión de lo nuevo que trae el Resucitado en cada generación, aquello que implica una fe abierta a la novedad y al misterio.

Algunos testimonios

Me he dado cuenta sin buscarlo  de que sentía algo especial por dentro, de que me sentía curado, bendecido, masajeado con amor, como si alguien me hubiera puesto encima unas manos repletas de amor. Todo eso sin la más mínima euforia, no estoy para eso, sin el más mínimo pensamiento de que mi vida va a cambiar desde ahora porque ya conozco la fórmula, pero sí dándome cuenta de que hay acciones y experiencias que curan, que nos bendicen por dentro de forma que ni siquiera podemos describir: parece que el irnos a celebrar la muerte y resurrección del Señor con una liturgia bella y antigua, con nuestras familias, con gente buena y sencilla a un sitio tan bello como el Hornico, permite que el Señor pase cerca de nosotros (Miguel).

Accidental y casualmente el sábado oí una conversación entre dos jóvenes: Uno de ellos decía algo así como “bueno, está bien esto de la reflexión, del debate, vale, porque es Semana Santa y estamos de vacaciones, pero ya. Esto se acaba, lo dejaremos aquí, si acaso, hasta la próxima Semana Santa”. Creo que no será así, que emergerá el recuerdo y las vivencias compartidas estos días y, la experiencia, no quedará en un episodio en las vacaciones de Semana Santa acompañando a los padres y hermanos pequeños junto a un grupo de gente agradable y enrollada (Pepe)

Quería enviar los deseos que recopilamos en el coche ayer; cada uno de los niños fue diciendo su sueño más profundo. María: "que no hubiera guerras en el mundo". Fernando: "que todas las personas se sintiesen bien". Luis: "que los que están alejados de sus familias o de sus países pudiesen reencontrarse". Quique: "que Jesús resucite en nuestras vidas". Carlos: " que la gente se sienta amada". Enrique padre: " que cada persona se sintiese amada". Carmelina: "que cada hombre y mujer del mundo sintiese en su vida el Amor de Dios". Esta es la Pascua que os deseamos, gracias por haber hecho que la vivamos un poquito más, por habernos ayudado a ser un poco más conscientes de que el Amor de Dios está vivo entre nosotros y la Resurrección de Cristo se hace una realidad concreta en la Iglesia que formamos todos (Carmelina)

 

Este es también nuestro deseo para todos los amigos de AyC en esta Pascua 2013.

¡RESUCITÓ! DAR VIDA se opone al a explotación del pobre,
y al reemplazo de Dios por el dinero.
EN NOSOTROS la búsqueda y la espera apuntan al encuentro,
implican una fe abierta a la novedad y al misterio.

Materiales

Jueves Santo

Acoger a Cristo, cuidar de los demás, salvaguardar la Creación

Viernes Santo

Oración de la mañana: 8 gestos de misericordia de Jesús

Meditación sobre Pedro Arrepentido, de Rembrandt

Una Iglesia en diálogo: Primer y segundo círculos

Sábado Santo

Los cristianos, hermanos separados: Tercer círculo

Buscar dónde encontrar a Cristo: Propuestas 2013 de Taizé a los jóvenes

Domingo de Resurrección

Resurrección

Hacerse amigos de todos

Lucas, el más joven de la Pascua

Fotos del bautismo de Lucas

Fotos

Todas las fotos de José

Ver fotos realizadas por Myriam