Cena AyC en Zaragoza
Queremos dar las gracias a todos por vuestra participación en la cena del pasado 22 de abril en el restaurante El Cachirulo, Zaragoza, a favor del proyecto AyC "Escolarización de los niños y niñas del colegio de Chateau (Haití)". Lo primero a los comensales por vuestra simpatía y generosidad, a los voluntarios por su vuestra disposición y acción, a todos los donantes de regalos para la rifa (tan importante), a los que han hecho su trabajo con amor y cariño, a los artistas que nos emocionan un rato (tan diferentes), a todos. Quiero destacar el trabajo de Javier y Nerea en la presentación que dirigieron la gala estupendamente y supieron resolver todos los problemas que se encontraron con un alarde de profesionalidad e inteligencia dignos de encomio.
Creo que hablo en nombre de Patricia, Pilar, Paula, Javier y en el mío propio:
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS
José Garrido Lapeña
Más información sobre el proyecto de Chateau
Brindis
Alzamos nuestras copas para bendecir esta mesa en este tiempo de Pascua, en el que los cristianos celebramos la resurrección de Jesús. Creer que Dios ha resucitado a Cristo de la muerte es empezar a celebrar ya que la vida triunfará finalmente sobre el odio, el abandono, la crueldad y la muerte. Que es posible comenzar a vivir sin miedo, en la confianza de que hay una fuerza misteriosa que transforma y multiplica el pequeño bien que cada uno de nosotros hacemos
Nos reúne esta noche el sufrimiento causado por el paso del huracán Matthew en un país ya devastado, nuestro querido Haití. Cuando parecía que todo estaba volviendo a la normalidad, el pasado 4 de octubre, el huracán más potente de htlos últimos diez años arrasó la costa suroeste del país y parte de República Dominicana y Cuba. La catástrofe afectó a 2 millones de personas. Los niños y niñas son, a las menudo, los más vulnerables durante los desastres como este. Algunas aulas de los colegios han sido destruidas, muchos padres han perdido sus medios de vida.
Brindemos esta noche por las redes de fraternidad que sostienen la esperanza. Que como la cena esta noche pueden ofrecer ese gesto que puede significar para muchos la diferencia entre la esperanza y la desesperación. También para nosotros mismos, porque nos negamos a creer que la vida es un dejarse llevar hacia lo más cómodo, o que el dinero solo sirve para alimentar la codicia que lleva a la corrupción. Porque creemos que los otros, especialmente los que más vulnerables, no son una carga, sino un don. Brindemos.
Fotos
Nuestro agradecimiento a:
