OTRO CONTENEDOR DE COMIDA PARA LOS PEQUES DE HAITÍ

El 13 de octubre, cargamos un contenedor que llaman de cuarenta pies, con comida no perecedera, de modo que para las próximas navidades tengan algo que poner sobre la mesa en los lugares que estamos acompañando en Haití.

El contenido  ha sido:

Junto a esto van  cincuenta mil mascarillas y cuatrocientos litros de gel. También van mil litros de aceite y un poco de ropa para recién nacidos.

Haití es como un pozo sin fondo. Un lugar de un constante sufrimiento. Lo que hacemos es como poner una gota de agua en la boca de un sediento. Pero con todo este material va cantidad de amor y ganas de que sea posible un mundo más justo y más fraterno. Es nuestro deseo reducir el sufrimiento y el dolor del mundo.

Agradezco a todos los amigos de Acoger y Compartir que comparten un poco de su economía para que sea posible este pequeño milagro.

Llegará a Puerto Príncipe aproximadamente dentro de un mes. Sacarlo del puerto y meterlo en pequeñas y disimuladas furgonetas será la última etapa para que todo llegue a su destino y no sea secuestrado por los grupos que están robando en las carreteras.

Se distribuirá entre los niños y niñas de la escuela san Gerardo y el orfanato Damabiah, en Puerto Príncipe. Entre los niños y niñas de las escuelas de Chateau y Fonfrede. También en la parroquia de Fort Liberté y las familias a las que se ayuda en Jeremie.

Gracias a todos por vuestra solidaridad y por no olvidarnos de los pobres en este tiempo de normalidad engañosa en la que tantos están viviendo días de estupor.

Fotos