Curso AyC sobre el ConcilioVaticano II . Lección 2
Variado menú de temas
El Vaticano II es una pasarela por la que desfila una infinidad de temas. Por eso, dedicarle un recuerdo prolongado no tiene por qué ser sinónimo de monotonía. Hoy presento un plan de los asuntos a desarrollar, encuadrados en tres áreas. I. Del anuncio del Concilio a su comienzo (1959-1962). II. La celebración del Concilio (1962-1965). III. El Postconcilio (1965-2012).
I. Del anuncio del Concilio a su comienzo (1959-1962)
El 25 de enero de 1959 Juan XXIII sorprende a todo el mundo con el anuncio de un Concilio Ecuménico. Un acontecimiento de tal envergadura necesita una preparación de muchísimos aspectos materiales, realizada de modo bastante satisfactorio. Pero el punto principal de la preparación es la elaboración de los textos que servirán de base para los debates conciliares. Este proceso consta de dos fases. Primera, la selección de los temas a debatir en el Concilio, llevada a cabo a partir de las respuestas a una macroconsulta abierta a casi 2900 personas e instituciones eclesiales. Segunda: a partir de la selección hecha, pero sin ceñirse rígidamente a ella, una red de Comisiones y Subcomisiones redacta más de 70 textos. Este material resulta muy indigesto tanto por el número como por su orientación pues no responde a las grandes líneas inspiradoras del Concilio ya diseñadas por Juan XXIII. Este “pecado original” no impedirá un buen Vaticano II.
II. La celebración del Concilio (1962-1965)
1. Quién es quién en el Concilio
Juan XXIII y Pablo VI, dos Papas, dos estilos: Juan XXIII deja más hacer, Pablo VI es bastante intervencionista. Los Padres conciliares, cerca de 3000, en su grandísima mayoría obispos, llegan como una multitud inconexa y, si nos guiamos por las respuestas a la macroconsulta, conservadores. Pero, en poco tiempo se conocen, establecen relaciones y gradualmente se hace el milagro de una mayoría renovadora frente a una minoría conservadora. Sin los cerca de 500 expertos y, por supuesto, sin el Espíritu Santo ¿qué hubiera sido el Vaticano II? Auditores/as son testigos casi silenciosos del laicado eclesial. La presencia de observadores cristianos no católicos, exteriormente muda, transmite un mensaje frecuentemente escuchado.
2. Historia antes que documentos
Existe una cierta tendencia a centrar el conocimiento del Vaticano II en sus documentos oficiales. Es lógico conocerlos, pero detrás de ellos hay una historia viva, fascinante, entretenida, no fácil de percibir con su mera lectura. Iremos recorriendo sus grandes momentos divididos entre períodos de sesiones (cuando los Conciliares están en Roma) e intersesiones (largos meses entre el final de un período de sesiones y el comienzo del siguiente, cuando la mayoría de los Conciliares vuelven a sus lugares de origen). En las intersesiones se hace un trabajo sobre los textos, de importancia fundamental.
El primer período de sesiones (otoño 1962) asistimos a una sorpresa: el Concilio comienza a distanciarse de la mala preparación y empieza a tomar un nuevo rumbo. Dos momentos significativos: elección de los miembros de las Comisiones Conciliares y rechazo del texto sobre las “Fuentes de la revelación”: es un golpe certero a la mala preparación. No se aprueba ningún documento.
Segundo período de sesiones (otoño 1963). El Concilio confirma la dirección tomada en el I período: se hace adulto. Se estudian varios textos y se promulgan los dos primeros documentos: Liturgia y Medios de comunicación.
Tercer período de sesiones (otoño 1964). Gozos y dolores. Es, probablemente el período más tenso. Aparte la tensión “normal” de los debates encendidos, ésta sube de tono con varias intervenciones de Pablo VI, mal acogidas por la mayoría y cuyo momento más álgido es la llamada “Semana Negra” (noviembre). Sigue el estudio de varios textos y entre los gozos están tres importantes documentos promulgados: Sobre la Iglesia, Ecumenismo e Iglesias Católicas Orientales.
Cuarto período de sesiones (otoño 1965). El barco llega a puerto. En este período aumentan las votaciones y disminuye el tiempo de debates. Es hora de recoger la mayor parte de la cosecha. Los 11 documentos restantes son aprobados y promulgados. El Concilio ha terminado. Ahora comienza su puesta en práctica, la hora de la verdad.
Las intersesiones, unos 30 meses frente a los sólo 8 meses de los cuatro períodos de de sesiones tienen una importancia capital para la marcha y los resultados del Concilio. Durante ellas se llevó a cabo un trabajo colosal e ímprobo sobre los textos estudiados por los Padres.
3. Documentos conciliares
Los 16 documentos conciliares tienen un valor muy desigual tanto por el tema como por la atención que les prestó el Concilio y el tratamiento que les dio.
Nos detendremos, de modo especial, en los más importantes.
III. El Postconcilio (1965-2012)
1. Recepción del Concilio.
¿Ha penetrado el mensaje del Concilio en la vida de la Iglesia, en el pueblo, en las "altas esferas"? ¿Cambios en las mentalidades, en las actitudes, en las conductas, en las instituciones? ¿Una obra de largo alcance, en palabras algo solemnes de un obispo, pero no carentes de su grado de verdad, “un Concilio del siglo XX para el siglo XXI”?