Viaje de José Miguel
a República Dominicada y Haití
23 de noviembre
Patricia y Fafo me llevaron al aeropuerto a las 7 de la mañana... El vuelo en la avioneta que tanto temo ha sido mejor de lo que pudiera pensar. Desde el aeropuerto e La Isabela hasta el de Las Américas me ha traído Miguel... Ahora a leer y esperar a la noche, cuando tomaré el vuelo... ¡¡¡Mañana por Madrid!!!
22 de noviembre
El encuentro de la comunidad de Taizé en Ruanda ha estado muy presente durante estos días en Haití.
Hablar de reconciliación donde se ha producido un genocidio tal supone una gran audacia y sensibilidad. Más acogiendo a jóvenes del Congo o, incluso visitando su frontera.
Rezamos para que Cristo acompañe los pasos dados por Hno Alois en esa tierra donde sigue la violencia y la oposición llena las cárceles. Oremos para que ningún hombre o mujer de iglesia crea, piense o actúe dañando otras iniciativas creyentes, porque sospeche que la pluralidad resta eficacia o energía al desafío de la Nueva Evangelización.
Estos días, con frecuencia, la oración nacía de la lectura del libro "à la joie je t'invite", fragments inédits 1940 - 1963, de Frère Roger. En la página 99 escribe: "Él está aquí para todos, no ya para un pueblo, sino para todas las naciones. He aquí uno de los fermentos revolucionarios del Evangelio. Aquel que vive de Cristo, es a partir de ahora llamado a renunciar a las barreras de razas o de clases. De esta manera, era farsante el que, portando el nombre de cristiano, permanecía como el hombre de un grupo elegido, de una secta, de una casta. Él está aquí para todos. Desde ahora, se ha depositado entre los hombres una semilla de fraternidad universal, de ecumenismo, de catolicidad. Este grano es lanzado a la tierra, esta semilla germina y crece sin que sepamos cómo".
Bendice, Señor, nuestra tierra con hombres y mujeres capaces de ver la acción de tu creativa bondad en todo compromiso humano porque se saben redimidos por ti, y en ellos todo es para bien.
22 de noviembre
Hoy es el cumple de Patricia, así que buscaremos un sitio para comer fuera y celebrarlo a la vez que su buen trabajo con AyC. Aunque se le multiplica el trabajo, hemos encontrado la manera de seguir con su colaboración los meses siguientes.
Hemos pasado dos días por el sur, Patricia, P. Kenol, Fafo y yo. La primera alegría fue llegar al dispensario de Charpentiere, a las afueras de Los Cayos. Está ya en marcha. Un grupo de mamás con sus niños enfermos esperaban en la sala la atención del médico. AyC ha hecho con esta construcción un buen trabajo. P. Kenol viendo cómo funciona me dijo "es casi un hospital". La hermana responsable vino a saludar y me llevó hasta la sala que han llamado Ntra. Sra. de la Consolación, que es una habitación con unas camas para las personas que llegan desnutridas o agotadas al dispensario. Después me hace notar que han puesto una inscripción en la pared del primer piso recordando a la Virgen del Pilar de Zaragoza. Un gracias grande a los que estáis organizando la cena de Zaragoza y a las Hnas de la Consolación que nos dieron una ayuda tan valiosa para realizar este proyecto que está siendo tan útil para tantos empobrecidos.
Seguimos camino hacia Chateau. Sandy ha derribado árboles y destrozado caminos. Se han perdido muchas cosechas por lo que hay una amenaza alimentaria fuerte. Por este motivo Japón ha enviado toneladas de arroz que el gobierno reparte con camiones dentro del programa que han llamado "Abajo el hambre".
Otra alegría ha sido llegar y ver la escuela que nos ha ayudado a construir el Real Madrid. Está prácticamente terminada. Con el ingeniero Damas decidimos construir una pequeña cocina, un campo de fútbol y una tapia de seguridad para los niños en la zona de entrada. Cuando la estábamos visitando se puso a llover a raudales como si fuera una bendición.
Después de cenar reunión con Kenol y Edy para hablar del protocolo para la entrega de la obra. Y después de cenar, agotados, nos fuimos a dormir. En esta zona de la sierra hace menos calor y hay muchísimo más silencio que en Puerto Príncipe.
A eso de las siete de la ma ana hemos celebrado la eucaristía en la habitación que hace de capilla en la casa. Presidió el P. Kenol. Todo, menos el Padrenuestro, en creolle. Un grupo de vecinos celebra con nosotros. La pequeña habitación se ha llenado. Cantan con una sonoridad dura. La vida de estas personas está marcada por carencias esenciales. Presiento que su fe está hecha a prueba de esperanza.
Contemplado la presencia eucarística en esa situación pasa por mi cabeza y mi corazón un texto de Roger, que es como una oración, dice: "Ninguna resonancia sensible me asegura tu presencia en mí. ¿Debo dudar de esa realidad? No, porque tu vienes a mi independientemente de mi sensibilidad. Ella no tiene en cuenta más que mi débil fe, más pequeña que un grano de mostaza".
A las 8:30 h reunión con los padres de los niños que estamos ayudando a su escolarización. Los niños y los adultos aquí son extremadamente serios. Es como si no conocieran la felicidad. Quizás sin el cómo. Es una seriedad triste que no solo habla de carencias materiales. Se les ha informado de la situación de la obra y otros detalles. Está presente en la reunión el obispo de la zona Mons. Romelus. Hay aplausos para los españoles que están colaborando a la escolarización de los pequeños, en este momento 90 niños. Terminado el encuentro con las fotos de rigor continuamos camino hacia Fonfrede.
Cuando llegamos los papás de los niños ya nos están esperando en la iglesia. Hay una asistencia muy alta y esto nos sorprende. La comunicación resutó fácil. Evitamos utilizar el francés que casi nadie comprende y del español se traduce directamente al creolle. Un aplauso cuando confirmamos que vamos a seguir con el proyecto iniciado.
Con el nuevo año ponemos en marcha la construcción de la cocina, el comedor y las letrinas para los niños. Todo lo recaudado en las cenas de este año será para este proyecto junto a otras ayudas como la de Europa Press y el Naturalista.
Tanto en Fonfrede como en Chateau los padres están de acuerdo en formar equipos de trabajo para el mantenimiento de las escuelas y diálogo con los profesores.
Mientras nos hacemos la foto de grupo, Patricia cuenta aula por aula la asistencia de esta mañana a clase. Nos alegra el número. Hay 374 niños en este momento. A todos ellos se les ayuda con el 90% los gastos de su escolarización. Hay un ambiente muy positivo respecto a la escuela. Algunos padres vienen a saludar y a dar las gracias a todos los que en AyC hacen posible este proyecto.
Antes de aparecer en todos los noticiarios debido a su paso por Nueva York, el huracán Sandy causó destrozos en Haití. Se ha comido el pozo que estábamos perforando en Fonfrede
Una llamada telefónica del ingeniero Damas nos avisa que la carretera de vuelta a Puerto Príncipe está cortada. Queda en avisarnos de cómo evoluciona la situación porque se trata de un grupo reivindicativo que protesta por la situación quemando neumáticos y cortando el tráfico.
Después de comer el plato típico haitiano, arroz con judias y bananas, y sabiendo que la barricada había sido disuelta, reeprendemos la vuelta a Puerto Príncipe. En el lugar que nos habían avisado están sobre la carretera las manchas de los neumáticos quemados pero el camino está abierto. Así llegamos sin mayor problema a Puerto Príncipe. Fafo ha conducido todo el tiempo.
Por la noche buscamos un lugar con wifi libre para comunicar con los amigos y a la vez tomar algo antes de irnos a dormir.
Cuando volvemos a casa, otra alegría: hay luz eléctrica.
Mañana, día de descanso y preparación de la vuelta. El viernes vuelo a Santo Domingo y por la noche vuelo a Madrid para llegar el sábado 24 a eso de las once de la mañana.
Hoy vamos a celebrar con sencillez, alegría y gratitud el cumple de Patricia.
Un texto marca este día: "la conjunción del sufrimiento por los otros y la alegría de Cristo".
Haití sigue siendo un pozo sin fondo... Foto de esta tarde en Puerto Príncipe
19 de noviembre
Serían las ocho de la mañana cuando hemos salido Patricia, Fafo y yo hacia la escuela de Pandiassou, en Hinche. Algunos comentarios por el camino sobre los desastres de SANDY, especialmente al cruzar el río Riviere Gris que ha hecho tanto daño en los asentamientos de tiendas que aún quedan. Se desbordó el río y arrasó campos con tiendas de refugiados.
En Puerto Príncipe, han quitado los asentamientos que más se veían, como los del aeropuerto, Petion Ville, Palacio Nacional, la oficina del primer ministro... pero permanecen los de los barrios pobres que son menos visibles: varios en Delmas 33, Carrefour, varios en Tabar y tiendas por todos los rincones de la ciudad. Se habla aún de unas trescientas mil personas en tiendas.
Ya en Hinche hemos tenido la reunión con los padres de los niños a los que pagamos la escolarización. Están disponibles para hacer que funcionen grupos de trabajo a cambio de la escolarización.
Se ha entregado el controlador de cloro y la nueva placa conmemorativa de la donación hecha por Canal Isabel II para la potabilizadora.
Seguiré informando. Aquí hay mucho problema con internet. Esta noche buscaremos algún lugar en Puerto Príncipe, a donde vamos a volver después de comer. Vamos ahora a la comunidad de los Misioneros Redentoristas para concretar algunas cuestiones.
18 de noviembre
Estos días leo el último libro del leonés Andrés Trapiello sobre la guerra civil española. Las imágenes vistas aquí ayer durante el reparto de alimentos a la población me recordaba la facilidad con que el ser humano cruza el umbral de la brutalidad que deshumaniza. Una de esas fronteras es el hambre. Hacer que una anciana o una joven peleen como animales, como lo hacían ayer, por llegar hasta la caja de un camión para que le den un poco de aceite, un par de kilos de harina, dos bolsas de fideos y una botella de agua... es hacerles perder el pudor que protege la dignidad humana. Cuando se vaciaron los dos camiones aún quedaban muchísimas personas esperando. Una mujer decepcionada vino hacia nosotros mostrando a Patricia y a mí su ticket, y una pequeña marea de gente seguía a los camiones como si de pronto fuesen a pararse para volver a repartir alimentos, o como si fuera a desprenderse algo de ellos. Como niños tristes caminaban tras el camión.
Aquí hoy es fiesta Nacional pero el Presidente está por Europa tras su asistencia a la Cumbre Iberoamericana de Cádiz.
Trapiello escribe: "Por qué cientos de miles, millones de hombres trataron de matarse unos a otros, cuando desde la creación del mundo se ha demostrado que eso es un mal, física y moralmente hablando?"
Esta pregunta pasaba por mi corazón durante la eucaristía de esta mañana. Antes de las 07:30 am ya estábamos aquí. Por primera vez después del terremoto de enero 2010, he celebrado en el mismo lugar en que festejamos la inauguración de la escuela San Gerardo. Imposible describir algunos sentimientos, pero lo que estaba viendo y la celebración de la que formaba parte es el triunfo del ser humano sobre cualquier desgracia.
Han demolido prácticamente todo el templo. En pie solo quedan las dos paredes laterales con su diseño a modo de celosías y dos trozos de lo que fue la puerta de entrada. Con maderas y chapas han construido una especie de barracón que esta mañana se ha llenado por tres veces para celebrar el misterio de la presencia de Cristo en la comunidad y en el pan santo. A las 05:30, a las 07:30 y a las 09:30 am.
Durante nuestra celebración, a las 07:30 am, una anciana no paraba de bailar. Tras la consagración, a modo de aclamación, un canto en castellano: "Resucitó, resucitó, resucitó. Aleluya, aleluya, aleluya, aleluya. ¿La muerte, dónde está la muerte, dónde está mi muerte, dónde su victoria?". Sobre las ruinas del terremoto este pueblo es capaz de entonar un canto como este que desfataliza los textos de la liturgia de hoy si es que alguien estuviera tentado a leerlos en clave dramática. Pese a todo, este pueblo ama vivir. Se merece mejor suerte y mejores personas en sus instituciones.
Volver a celebrar en este lugar, mientras peleamos para conseguir reconstruir la escuela en este barrio, me habla de la fuerza que Dios ha metido en el corazón humano.
Puede ser verdad que de vez en cuando Tánatos abra las puertas del infierno; pero eso no significa que estemos determinados a pasar por ellas. Hay otras soluciones, otras vías que alientan a renovar la vida.
La miseria, la ignorancia, el egoísmo brutal de los grupos privilegiados, el hambre sirven a Tánatos... un pueblo que canta el triunfo de la resurrección, pese al hambre y el terremoto en contra también las fuerzas necesarias para no obedecer a las fuerzas destructivas que genera el mismo ser humano.
17 de noviembre
La sorpresa ayer en el pequeño aeropueto de la Isabela, Santo Domingo (RD), fue que un empleado me informó de que había Wifi libre. En este pais se nota que algunas cosas mejoran; pese al malestar social que se vive en toda República Dominicana por la reforma fiscal (el nuevo gobierno se ha encontrado una deuda que tiene aterrorizado a todo el país). Tampoco aquí carecen de manifestaciones contra el Gobierno.
En la avioneta de la compagnia MAS veníamos sólo cuatro personas. La llegada a Puerto Príncipe a las ocho de la mañana de ayer fue acompañada por otra sorpresa: encontrar el aeropuerto prácticamente vacío. Pasé la aduana, por primera vez, tan campante. Nadie que me pidiera el equipaje para llevarlo ni cosa por el estilo. Parecía que me hubiera equivocado de país. Pero ahí estaba Patricia, al final del pasillo, esperando. Así, sin mayor atasco, llegamos a la sede.
El regalo a Patricia por su cumple. Un refresco para refrigerio ante la calorina que impregna todo. Y un tiempo de conversación para re-programar la agenda de la visita y también los próximos meses.
Como Patricia conoce bien Puerto Príncipe, hemos ido a comer a un lugar limpio y económico: banana, pollo y arroz.
Yo estaba tan cansado que después me fui a dormir y prácticamente hasta esta mañana.
Hemos comenzado el día acordándonos de Nachito, Loreto y Tony ... y del encuentro que este fin de semana los Hnos. de Taizé están realizando en Ruanda. Con estos dos temas de fondo hemos desayunado. Un texto escrito por el Hno Roger en 1948 (yo tenía entonces un año) y que Patrica iba traduciendo, nos ha servido de guion en nuestra conversación.
Patricia lo está traduciendo para poderlo poner aquí ya que es un texto inédito que aparece en el último libro publicado por les Presses de Taizé.
Hemos tenido una reunión con el P. Kenol. Dos horas de diálogo poniendo los pies en la tierra de cara a lo que consideramos ya la etapa final de nuestra ayuda por el terremoto. Para Mayo de 2013, todo debe estar en vías de normalización.
La cuesta que conduce a la zona de la parroquia San Gerardo estaba bordeada por un cordón hecho de mujeres. Seguro que esperaban algo. Dos grandes camiones al otro lado de la cuesta. Nos dicen que ahora el ayuntamiento envía estos camiones para distribuir comida a los ciudadanos. Pura supervivencia.
Los medicamentos traídos los he distribuido entre los refugiados haitianos de Paraiso (RD), también se beneficiarán de ellos en San Gerardo, Hinche y Chateau, lugares que visitaremos los próximos días.
Texto del Hno. Roger
Octubre 1948
Uno de nuestros hermanos, considerado ya curado, acaba de tener una recaída. El sufrimiento que atenaza no deja de brotar en mí. Desde hace varios días, intento discernir el porqué de nuestro sufrimiento común. Intento rememorar lo que he aprendido al respecto. El sufrimiento es el estado en el que nos ponemos a prueba con más fuerza. El dolor, girándome hacia el yo, absorbe el ser en su totalidad. Desaparezco en él. Percibo entonces un ser desconocido que gana en profundidad lo que quizás pierde en espontaneidad. La causa importa poco, solo el uso de mi dolor. Ya sea indignación, resignación, complacencia, yo no quiero estos frutos amargos. Solamente probarlos me envilece. Sin que me diera cuenta, estos frutos destilan en mi alma una hiel de amargura. Quiero que el sufrimiento active en mí las resoluciones, que reúna mis fuerzas dispersas, me interiorice, me dirija a la aceptación.
Sufrimiento, seas el que seas, antes que nada te digo sí. Quiero, a través del dolor impuesto, buscar la superación de mí mismo. Sé que mi consentimiento no será espontáneamente gozoso, pero ¿por qué, sin embargo, no tender a la alegría del reconocimiento?"
15 de noviembre
José Miguel ha participado en República Dominicana en la eucaristía de inauguración de un centro de formación con el que ha colaborado AyC.
En la foto, el P. General de los Redentoristas, Michael Brehl, con José Miguel, antes de la eucaristía
Eucaristía de inauguración presidida por el P. General
14 de noviembre
Viaje a Cotui (Rep. Dominicana) donde se ha encontrado con el Padre General de los Misioneros Redentoristas, P. Michael Brehl.
En la foto, José Miguel en Rep. Dominicana con el P. Manuel Rodríguez, Provincial de Puerto Rico y P. Rafael, también redentorista
13 de noviembre
José Miguel partió del aeropuerto Madrid-Barajas rumbo a Santo Domingo, gracias a un billete generosamente donado por Air Europa. Una vez allí, pasó sin problemas la aduana con los medicamentos que lleva para Haití